Como en toda producción fotográfica, el resultado es siempre impredecible. En este caso, que no es la excepción, contábamos con una luz de difícil pronostico, mucho verde y además pocos ángulos para el lente. Y como sucede recuentemente, algunos personajes creen que todo el mundo está pendiente de lo ellos que hacen o no y los pueden descubrir tomándose un café, entonces piden quedar fuera del foco, por eso se ve tan poca gente, evitamos los problemas. El resultado fue espectacular, con la compañía de algunos rayos de sol que aportaron a la serie y el lente de Alfredo Mendez